miércoles, abril 1

Santa Tentacion


¿Qué si porque salto de tal manera?

Has vuelto a mi vida, te cruzaste y no fue cuestión fortuita, confieso que te busque, lo planee durante tiempo, nervioso de como habría de ser nuestro enésimo rencuentro, como podría verte a tus ojos (esos, mis ojos) y decirte he fallado. El fallarte no era la novedad de este encuentro, la fidelidad ante ti ser divino, es algo que me cuesta sangre, a las primeras de cambio te olvido, te guardo en el cajón de la rutina y te traiciono, nos traiciono, a ti y a lo que tenemos y nadie se atreve a definir.

Ni argumentare por novedad el vértigo cuasi-controlado a la sola concepción de un encuentro, ni mis (ya fallidas) innumerables excusas para explicarle al mundo que eres más que una gran idea, explicarles que la palabra perfección te define, y que un "nosotros" es lo único que pido cuando todo se derrumba.

La novedad tampoco es mi manía de redescubrirme en tu mirada, pleno, enamoradísimo (si me permites el superlativo), tal cual soy, redefiniéndome sin creer aun en la maravilla de tu amor, aquel amor que un buen día (el mejor día diría yo) se enamoro de este simple mortal con todo lo que soy, que decidió fijarse en estos girones de humanidad, y tomo como sacrificio enamorarse también de mis intentos de batallas y las derrotas que cargaba por resultado. Te vi, y la boca se me hizo agua a la simple idea de volver a alcanzarte, pero me impresione al notar que mi alma también se licuo haciéndose agua con tu sola presencia.

Te pertenezco
, tanto como me pertenece una parte de ti que jamás (aunque lo intentes tu y lo intente yo) podrás arrancar de Mi

La novedad de nuestro encuentro, simplemente eres
tú, así de simple, y con mi tendencia para intentar definirte, me doy cuenta que eres más grande en mi vida que todas las palabras que pudiera escribir, escuchar y leer.
Y eso Amor Mío, te hace una Santa Tentación.

Y no es que no lo supiera, solo se me antojo recordartelo...


P.D. gracias por ayudarme a recuperar la Fe y las ganas de escribir.