Ausencias

Si en algún momento creí en el Alma, es hoy, que me duele, y no juego con mis letras, ni trato de escribir de manera poética, es sensato, duele.

Duele tu Ausencia, y el abrazo que no me das esta noche. Duele el silencio que encuentro por respuesta al preguntar por ti. Duelen los raudales de amor que dejan de correr por el universo tras tu partida. Duele cerrar los ojos, y percibir tu aroma, escuchar tu risa, y al abrirlos, encontrarme solo, inundado de lagrimas.

Hermano, no exagero, dueles en el espacio de tu cama vacía, en la sequía que sufren mis mejillas sin tus besos, en el error que cometeré sin tu consejo, en el trozo de Fe que se fue corriendo para ver si te alcanzaba y que hoy aun no ha regresado, dueles, y me sabe a injusticia.

No quiero apagar la luz, tras lo oscuro de mi cuarto, solo hay demonios que susurran que no estas, que ponen el dedo en la herida, que me recuerdan que me encuentro solo, que te has marchado, y que esta vez no regresaras a colorear mi mundo.

Tan solo, y desde donde estés, desde donde existes, camina hacia adelante y carga con este triste amor...

Te Amo, con todas las risas que no se harán escuchar por que no habrá quien las provoque.
Te Amo, con todas las injusticias que se cometerán en el mundo sin un Hermano Mayor que me proteja
Te Amo, con las blasfemias y herejías que mi humanidad me han hecho proferir.
Te Amo, con todo el dolor que tengo en el alma, por que no se si te lo he dicho, pero Dueles.